Andrés Lillini va a quedarse en Pumas, con el apoyo de todos nosotros: Miguel Mejía Barón

Miguel Mejía Barón, vicepresidente deportivo del Club Universidad, habló de la situación del primer equipo varonil en la presente campaña al ofrecer una conferencia de prensa en las Instalaciones Ing. Guillermo Aguilar Álvarez, Jr. (“la Cantera”). 

Por principio de cuentas, afirmó: “El resultado que tuvo nuestro equipo en Barcelona fue un golpazo tremendo y ha tenido consecuencias: ha provocado una serie de rumores, inestabilidad, dudas sobre qué puede pasar con Andrés Lillini y su cuerpo técnico. Va a quedarse en el club, con el apoyo de todos nosotros”. 

“Andrés Lillini es el entrenador ideal para este club. El grupo tiene seis incorporaciones y eso no es muy sencillo para crear armonías. Se necesita tiempo y a veces no lo hay en este deporte o en cualquier otro que es profesional”, indicó. 

En ese sentido, abundó: “El inicio del torneo no fue tan venturoso: ganamos un partido y empatamos algunos otros, no habíamos perdido. Después vino el golpazo de Barcelona y ha coincidido con la llegada de (Dani) Alves. Lo que se imaginan algunos de que hay cláusulas que obligan al director técnico a que actúe los 90 minutos no existe. Puedo certificar que eso no es verdad”. 

Y recalcó: “Nos comprometemos a trabajar, de acuerdo a nuestras capacidades a ‘full’, para revertir esta situación. Lo que creo, tal vez de manera burda y simplista, es que hay gente nueva que necesita tiempo para conocerse entre ellos mismos. La llegada de Alves ha sido un suceso en muchos sentidos, pero necesitan conocerlo a él y él conocer a sus compañeros. En la competencia, por el calendario, por el Mundial, por las fechas, en 14 días vamos a tener cinco partidos. Y no me estoy quejando, es una circunstancia para todos. A nosotros nos está faltando coordinación y conocimiento entre los jugadores que están dentro de la cancha”. 

También indicó cuál es el estado anímico del plantel: “A Andrés le afecta no dar buenos resultados a la afición tan grande que sabemos que tenemos. Es una angustia que todos los que estamos aquí -la directiva, el cuerpo técnico y los jugadores- tenemos”. 

“El grupo está consternado, preocupado. El ambiente está terrible, pero son cosas que los profesionales hemos vivido y no nos debe espantar. Lo único que nos puede sacar de este bache es la unión y la confianza con que se ha ido formando este equipo. Este equipo está diseñado por el entrenador y por eso estamos convencidos de que debe continuar. El reto es bastante complicado. La exigencia para Pumas y para todos los equipos de la Liga en este torneo es muy grande. Estamos con la esperanza de revertir esto a través de la fuerza y personalidad de los jugadores que han llegado”. 

Al preguntársele su opinión sobre los debutantes de la cantera que no se han podido consolidar, respondió: “Para consolidar a jóvenes que están buscando una oportunidad y que vienen luchando desde fuerzas básicas para aparecer en Primera División, se necesita el apoyo de todo un equipo. Hay valores que con el tiempo van a mostrarse, como Érik (Lira), pero necesitan un equipo que sea triunfador y primero se estabilice para poder ayudar a los jóvenes a que puedan emerger como figuras. Primero debemos arreglar nuestras deficiencias como grupo”. 

“Hay que aprovechar la experiencia que tiene Andrés en todo su trabajo de fuerzas básicas y que es un entrenador joven, entre comillas, en este medio de la gran competencia de Primera División. Seguramente, todo lo que está viviendo le va a servir para ser mejor. Esperemos que se sienta arropado por sus jugadores y por la directiva y que eso le sirva para salir del bache donde estamos”. 

“A mí no me espanta la palabra crisis. Estar en crisis en cualquier actividad es parte de los retos que nos da la vida, como personas y como grupo. Hoy estamos en alarma, descontentos, angustiados, pero confiados en la capacidad de la gente que tenemos, tanto de la madura como de los jóvenes que están buscando consolidación”. 

Acerca de si aspiran al título, manifestó: “Todos los equipos que compiten, piensan en el título. La ilusión de ser campeón siempre va a existir. Sería uno increíblemente feliz de poderle dar esa satisfacción a tanta gente puma. Sé lo que significa eso porque tuve la fortuna en 1991 de tener esa satisfacción”. 

Por último, tuvo un mensaje para la afición del equipo: “Sé lo exigente y entregada que es la gente puma. Les pediría que tuvieran confianza en el trabajo y los jugadores. El entrenador está comprometido, entre confiado, animoso y angustiado, siempre con la ilusión de darle alegría a tanta gente universitaria. Siente el compromiso de los chavos y el cariño que le tienen. Y los jugadores que se están integrando, yo creo que están muy comprometidos con Andrés. No he visto ninguna fisura de la que deba preocuparme. Lo único que nos va a dar la oportunidad de salir (adelante) es no perder el ánimo y trabajar. Lo que nos falta es que se conozcan más los jugadores dentro de la cancha, que jueguen a lo mismo”.

Nota y Fotos: Cortesía Club Universidad Nacional